Habitaciones
Descanso envuelto en arte y armonía de la Ruta de la Seda
Nuestras 20 espléndidas habitaciones incluyen cinco suites de leyenda más La Alcoba Real. Diseñadas para dejarse llevar por el embrujo de esta tierra encantada y rodearse de románticos recuerdos con su perpetuo ambiente de poesía y novela. Armonía, sosiego y exquisita comodidad son palpables en la elegancia de sus colores, texturas y arte.
La hospitalidad de nuestras habitaciones, es un arte
En Seda Club encontrará un refugio sereno que le lleva a tiempos pasados en el corazón de Granada, perfecto para quienes buscan una escapada en un hotel 5 estrellas con carácter, elegancia y calma.
Cada habitación ha sido diseñada para que su estancia sea mucho más que un alojamiento, y se convierta en su espacio único.
La Alcoba Real
Nuestra joya más preciada. Una suite palaciega con dos habitaciones independientes, sala de estar y vistas que inspiran. Diseñada para quienes buscan el máximo esplendor, privacidad absoluta y el arte de vivir con refinamiento. Una estancia que no se olvida.
Suite
Para quienes necesitan más espacio. Con salón independiente, bañera y balcón a callejuelas escondidas o a la Plaza de la Trinidad, cada suite está diseñada para el descanso consciente y el deleite sensorial. Un lugar para dejarse llevar por el embrujo lento de esta ciudad.
Habitación Deluxe
Recibe una bienvenida suave como la seda. Habitaciones pensadas para envolverse en confort y serenidad, con vistas a un patio andaluz de aire morisco o a la Plaza de la Trinidad, en el hotel más romántico de Granada, ideal para quienes desean dejarse cuidar y vivir la ciudad con una mirada íntima.
Habitación Deluxe Patio
Jazmín, azahar y estrellas. Esta habitación con terraza privada ofrece acceso directo al patio central del hotel, donde el silencio florece entre fuentes y buganvillas. Una experiencia sensorial para quienes buscan un rincón privado desde el que descubrir el encanto de Granada.
Habitación Grand Deluxe
Desde los balcones de estas habitaciones se domina la plaza ajardinada de la Trinidad, con su fuente barroca y su fragante arboleda. Perfectas para quienes desean amplitud y carácter, sin renunciar a la emoción de observar la vida granadina desde las alturas.